Antes de cualquier mención, nuestras primeras palabras son de un profundo agradecimiento a la Santísima Trinidad, Dios-Hijo-Espíritu Santo, ya que todo sucede para la Gloria de Cristo que vive y reina en nosotros. Pedimos también a nuestro santo patrono, San Bonifacio, que guíe nuestros pasos por el camino de la alegría al servir amorosamente a nuestros semejantes. A las familias de nuestros educandos, a los alumnos que honran nuestra casa de estudios, a los educadores y personal auxiliar, les deseamos que continúen trabajando por una Argentina que promueva al ser humano de manera integral, capaz de formular y desarrollar su proyecto personal de vida, siendo un agente pacífico e impulsor del compromiso social para mejorar su comunidad y un ser consciente del “cuidado de la casa común”, nuestra tierra.
El Instituto Tecnológico "San Bonifacio", fundado por el siempre recordado Obispo de nuestra diócesis, Mons. Alejandro Schell, es la presencia de la Iglesia en el campo específico de la educación tecnológica, para la promoción humana, cultural y espiritual de la juventud.
Realizamos nuestra labor orientada hacia una educación integral, buscando formar personas con sólidos valores cristianos, ciudadanos críticos y comprometidos con su comunidad, y profesionales con habilidades únicas y responsables. Nuestra misión más significativa es llevar la buena noticia que Nuestro Señor Jesucristo anuncia en el Evangelio.En este mundo en el que Dios nos destina a vivir, reconocemos que la importancia de la Educación Católica es fundamental, pues tiende en todo momento a considerar al prójimo como hermano. En consecuencia, debemos trabajar para lograr acuerdos que faciliten una convivencia armónica y solidaria.
Nos comprometemos a seguir buscando en los jóvenes educandos esas grandes reservas morales que Dios les otorga desde su Bautismo, por las cuales, como hijos de Dios, deberán contribuir permanentemente a una convivencia solidaria y democrática.